martes, 11 de febrero de 2014

Shabby Chic



Shabby Chic

 

 

Nació en Gran Bretaña, pero pronto fue un estilo muy acogido por los ingleses, en las épocas de las grandes casas de campo, que se decoraban con muebles que adquirían en mercadillos y ventas de muebles ambulantes, estos estaban desgastados por el paso del tiempo.
 

Este estilo es una unión que actualiza lo antiguo y usado, convirtiéndolo en actual y elegante.
 



Los tonos pasteles y blancos son la paleta de colores que caracteriza a este estilo, aportando esa presencia del romanticismo.




Con el tiempo, esta estética casual se reinvento convirtiéndose en un estilo decorativo que en nuestros días han tomado gran protagonismo. Los ambientes gozan de gran claridad, ya que muchos de los muebles se pintan en tonos blancos, buscando deliberadamente un aspecto envejecido o decapado. Todo parte de una estética artesanal, tanto en los muebles como en los complementos.
 
 

 



El color aparece siempre en tonos pálidos, son matices que se añaden y al mezclarlos el blanco siempre gana la partida, siendo el color más predominante.

 







Su punto fuerte es añadir  el motivo floral tanto en sofá como en las camas, añadiendo muchos almohadones a ella, en tonos lisos y con estampados florales. La porcelana y el cristal tallado aportan parte del carácter de este estilo.
 
 
 


Para adoptar este estilo dentro de nuestro hogar, se puede conseguir reciclando los muebles, aplicando distintas capas de pinturas, en el que los colores que predominen sean colores pálidos; rosas, beiges, grises… y dándole un toque de color como por ejemplo en los cajones; con motivos florales, ya sea tanto en tela como por podría ser con papel pintado. Si  lijamos pronunciadamente los bordes del mueble  para darle a éste un aspecto mas desgastado. Otro complemento que no puede faltar dentro de nuestro hogar son los encajes, como si los aplicamos en cojines, colchas y almohadones. Las colchas pastwork también es un elemento que puede caracterizar este estilo.